Mis perros se pelean en casa

Por qué los perros que viven juntos se pelean: causas comunes

Tener dos perros en casa puede ser una experiencia maravillosa, pero no está exenta de desafíos. Hay un dicho conocido entre personas que tienen perro y es: “ya que tengo uno puedo tener dos, total, da el mismo trabajo”. Hmmmm, es una verdad a medias ya que al tener dos perros al menos duplicamos tres cosas:


1. La preocupación por cada uno.
2. El tiempo que les dedicamos si queremos cubrir las necesidades de cada uno.
3. El gasto económico que supone mantenerlos sanos, equilibrados y felices.

Y aparte de estos aspectos directo sobre la tenencia de más de un perro en casa, también están los aspectos conductuales basados en las interacciones entre ambos y su entorno. Es común que, en algún momento, tus perros tengan conflictos, especialmente si no comprenden bien la comunicación que mantenemos con ellos, las normas, los límites, o sus roles dentro del hogar. Las peleas entre perros suelen tener varias causas, como la territorialidad, la competencia por recursos (comida, juguetes, atención) o simplemente diferencias de “personalidad” que profesionalmente denominamos carácter. Por ejemplo, si uno de tus perros es muy activo y el otro es más tranquilo, podrían surgir tensiones si no se respetan los límites de cada uno.

La falta de una jerarquía clara entre ellos también puede llevar a peleas. Es importante que ambos perros reconozcan cuál es su espacio y que tú como humano establezcas una rutina clara que les permita sentirse seguros y respetados.

Cómo gestionar el espacio de convivencia de dos perros en casa

Uno de los puntos clave para evitar peleas entre perros es gestionar correctamente el espacio en casa. Cada perro necesita su propio «territorio». Desde mi experiencia, las veces que he convivido con perros temperamentales o con algún tipo de comportamiento protector noté que cuando compartían el mismo espacio todo el tiempo, las tensiones aumentaban. Lo que hice fue asignarles zonas de descanso separadas, donde cada uno pudiera relajarse sin ser molestado.

Si lo pensamos bien, esto mismo nos pasa a nosotros. Cuando queremos descansar y desconectar nos vamos a nuestra zona de relax: dormitorio, despacho, jardín o cualquier otra y nos gusta que en esa zona haya jaleo, ruido o más personas. 

Si ambos perros comparten el mismo espacio para dormir, es probable que surjan conflictos cuando uno invada el área del otro. Proporcionarles camas separadas en lugares tranquilos les dará el espacio que necesitan para sentirse seguros. Esto es especialmente útil para evitar que los perros más ansiosos o territoriales se sientan amenazados. Si los conflictos son graves, lo ideal es poner mucha distancia o una barrera física entre la zona de cada uno.

Establecer rutinas equilibradas para perros con diferentes caracteres

Es esencial que ambos perros tengan rutinas adaptadas a sus necesidades. En mi caso, uno de mis perros es muy enérgico y necesita más ejercicio que el otro, que es más tranquilo. Así que organizo paseos y tiempos de juego diferentes para cada uno. Si no organizas estas actividades de acuerdo con el temperamento de cada perro, puede generar estrés, especialmente en el perro más relajado.

Por ejemplo, si tienes un perro activo, asegúrate de proporcionarle suficientes paseos o sesiones de juego intensas para liberar su energía. Por otro lado, si tu otro perro es más tranquilo, permite que tenga momentos de calma sin la intervención del más enérgico. Organizar paseos separados puede ser una excelente opción si es necesario.

Estas rutinas se pueden hacer en casa con juegos estimulantes y si el conflicto entre tus dos perros surge en esas situaciones, puedes jugar con ellos por separado. Dedícale 15 minutos a uno de los dos mientras el otro está en su zona de descanso o en una habitación aparte y luego cambias a los perros de sitio y actividad.

Señales de estrés en los perros: Cómo identificar y actuar ante conflictos

Es fundamental saber leer las señales de estrés de los perros para evitar que los conflictos escalen. Los perros se comunican a través de su lenguaje corporal. Algunas señales de que un perro está incómodo incluyen gruñir, mostrar los dientes, alejarse, o incluso bostezar repetidamente. 

Pero hay una señal que nadie tiene en cuenta y es la que desencadena todas las demás: la mirada. ¡CUIDADO! la mirada fija y penetrante de un perro a otro ya nos habla de una intención, así que ese es el mejor momento para interactuar y cortar con el conflicto antes de que arranquen las siguientes señales. 

Cuando notes estas señales, es importante intervenir de manera calmada y no castigar a ninguno de los perros. En lugar de eso, aumenta la distancia entre los dos, pon una barrera física, separarlos, elimina el elemento que está creando la tensión o corta el comportamiento que están mostrando. Esto te ayudará a cambiar el enfoque y reducir la tensión. De esta manera, evitarás que la situación empeore.

Cómo intervenir positivamente cuando los perros se pelean

Enfrentarse a una pelea entre tus perros puede ser estresante, pero es crucial mantener la calma. Nunca intervengas físicamente entre ellos, ya que podrías empeorar la pelea o salir herido. Lo mejor es interrumpir la pelea de manera segura, usando comandos o haciendo ruido para distraerlos bien sea con una palmada fuerte, un grito o un silbido. 

Lo más importante es que no castigues a ninguno de los perros después de una pelea, ya que esto puede aumentar el estrés, la frustración y agravar los conflictos. En lugar de eso, refuerza el buen comportamiento con recompensas cuando estén tranquilos y sobre todo ofrecerles actividades con un objetivo concreto.

Uno de errores más comunes por los que este problema nunca acaba es que las personas que lo sufren quieren que los perros dejen de pelearse con algún tip mágico sin haber cambiado las rutinas de su día a día, ni la comunicación ni el foco de actividades diarias.

Actividades y juegos que favorecen la convivencia entre perros

Una excelente forma de mejorar la relación entre tus perros es mediante juegos y actividades controladas. Los paseos conjuntos son clave para fortalecer su vínculo. Al salir a caminar juntos, pero sin forzar la interacción, ambos se acostumbraron a estar cerca sin sentir competencia.

Otro juego es enseñarles a ambos a venir cuando los llamas. Esto no solo refuerza la obediencia, sino que también los ayuda a centrarse en ti, evitando que se enfoquen demasiado en el otro perro.

Además, es útil darles tiempo de juego por separado, para que ambos se sientan atendidos sin que el otro esté cerca, lo que reduce los celos y la tensión.

¿Qué tipo de juegos? Te doy alguna idea:

  1. En el número uno están los juegos más efectivos para la reducción del estrés y son los juegos de olfato. Haz que tu perro encuentre comida, juguetes, palos, piñas o a otro humano a través del olfato.
  2. En segundo lugar están los juegos de caza para canalizar los instintos más naturales en objetos que tienes en tu bolsillo. El juego del tira y afloja y correr a por la pelota o su juguete favorito.
  3. En tercer lugar los juegos de interacción contigo en base a la construcción y repetición de ejercicios nuevos.

Qué hacer cuando uno de los perros tiene problemas de comportamiento

Si uno de tus perros presenta problemas de comportamiento, es esencial que trabajes con él de manera individual. Por ejemplo, si uno es más reactivo, mientras que el otro no tiene problemas dedícale tiempo exclusivo al perro problemático para entrenarlo, sin que el otro perro estuviera cerca.

Esto evitará que el perro sin problemas se distraiga o copie el mal comportamiento. También es importante reforzar el buen comportamiento del perro que no presenta problemas. Cuando un perro actúa correctamente mientras corriges y trabajas con el otro, asegurate de recompensarlo para que entendienda que está haciendo lo correcto.

Cómo reforzar el buen comportamiento en ambos perros

El refuerzo positivo es fundamental para mantener una convivencia pacífica. Reforzar las conductas positivas es mucho más efectivo que castigar los malos comportamientos. 

Si tus perros actúan de manera tranquila, te consultan y te hacen caso cuando les pides algo debes reforzar ese comportamiento con la voz, una caricia, un premio comestible o un juguete, esto ayuda a que entiendan lo que esperas de ellos.

También es útil crear situaciones controladas en las que ambos perros interactúen de manera positiva. Esto puede incluir juegos compartidos, pero asegurándote de que ambos reciban atención por igual para evitar “celos” o más bien reclamos de atención o protección de recursos.

Conclusión: crear una convivencia pacífica y feliz entre tus perros

Tener dos perros en casa puede ser un reto, pero con paciencia, organización de espacios, rutinas y el uso de técnicas de refuerzo positivo, es posible lograr una convivencia equilibrada. Recuerda que cada perro tiene su propio carácter y necesidades, y que entender estas diferencias es clave para evitar conflictos. Proporciona espacios adecuados, adapta las rutinas a cada perro y mantente atento a las señales de estrés. Con el tiempo, tus perros aprenderán a convivir en paz, y tú disfrutarás de un hogar en armonía.

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Los perros pueden pelear entre ellos en casa por diversas razones, PERO…

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